Actividad 6.1
MI EXPERIENCIA A LO LARGO DEL CURSO
Antes de entrar en el relato de mi experiencia a o
largo de este curso, me gustaría exponer las razones que me movieron a
solicitarlo reiteradamente hasta que, por fin, conseguí poder hacerlo. Durante
los dos últimos cursos que, como en el curso actual, he impartido mi docencia
en el tercer ciclo de primaria, he tenido dos alumnos con todos los problemas
derivados del TDAH; y la verdad es que lo pasé bastante regular, a pesar de los
consejos de los compañeros que les habían impartido clase con anterioridad, de
mi buena paciencia y de la gran comprensión de las familias (que no lo pasaban
mucho mejor que yo). Reflexionando sobre esta situación, busqué la forma de
realizar algún curso sobre este tema, y lo solicité durante los dos años que
tuve a estos alumnos (quinto y sexto), pero no pude obtener plaza. Este año, a
pesar de estar más tranquila en este sentido, continuaba interesada en formarme
sobre este trastorno y volví a solicitar este curso, que, por fin, he
conseguido poder hacer.
Mi
principal dificultad ha sido, por tanto poder acceder al curso; no obstante,
también en el transcurso del mismo he tenido mis serias dificultades, muchas de
ellas creo que se han debido a no ser maestra especialista en Educación
Especial ni disponer de grandes conocimientos sobre el alumnado con necesidades
educativas especiales. Esta particular situación ha hecho que haya tenido que
dedicar mucho más tiempo del que yo creía al curso, de tal manera que no he
podido, como me hubiera gustado, realizar algunas de las actividades
voluntarias.
Sobre
los éxitos, el mayor sería superar
satisfactoriamente este curso (cosa que todavía está por ver); sin embargo, sí
que puedo hablar de éxitos parciales como son, por ejemplo, el haber podido ir
entregando, hasta ahora, las actividades de cada uno de los bloques en el
tiempo requerido, el haber podido aprender tantas cosas no solo de los temas y
de la magníficas orientaciones del tutor sino de los compañeros y compañeras a
través de los foros, o el haber podido acceder a un material audiovisual
extraordinariamente interesante para mi formación, que en este tema en concreto
era bastante escasa.
De
fracasos como tales, no puedo hablar. Más que fracasos, lo que he encontrado a
lo largo del curso, como he comentado antes, han sido dificultades, unas más
grandes que otras. Quizá la más cercana al “fracaso” haya sido la de no superar
el taller en que otros compañeros/as han valorado nuestro trabajo, pero hasta
esto también me ha servido para aprender algo más.
Por
fin, creo que las aportaciones del curso han sido muy positivas y
enriquecedoras para mejorar nuestros conocimientos sobre el TDAH y
proporcionarnos, asimismo, una mejor competencia como profesionales de la
enseñanza que nos permita atender de manera adecuada las necesidades de los
niños y niñas que padecen este trastorno. Al menos para mí, así ha sido, de tal
manera que si en los dos cursos anteriores hubiese dispuesto de los
conocimientos que ahora tengo, estoy segura de que mis alumnos TDAH hubieran
salido bastante más beneficiados, y yo también lo hubiera pasado bastante
mejor, porque no es nada fácil tener que afrontar la educación de estos alumnos
sin tener la competencia requerida para ser mínimamente eficaces en nuestra
tarea pedagógica.
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